Quería comentar algo que vengo observando. Por un lado, me desconcierta, pero por otro, si realmente yo funciono así, firmo ya mismo.
Desde hace varios meses me doy cuenta de que mi cuerpo necesita una dosis fija de insulina rápida a la hora de comer y de cenar.
Si no he hecho deporte antes, en esas dos comidas siempe necesito 6 unidades de Novorapid, independientemente de que ingiera más menos 2-3 raciones de HC.
Pongamos como punto de partida 100 mg/dL en el momento de empezar la ingesta y 6 unidades de rápida administradas:
– Si la ingesta correspondía a 8-9 unidades, pasada una hora estaré en 170-190, a las dos horas de haber comido terminaré entre 130-140 y a las 3 horas estaré en 100.
– Si la ingesta correspondía a 3-4 unidades, pasada una hora estaré en 60-70, que remonta sola a los 15-20 minutos, a las dos horas de haber comido estaré entre 100-110 y a las 3 horas estaré en 80.
En los dos casos, el MCG me señalará 3 horas después de la ingesta la flecha oblicua descendente y tendré que darle unos sorbos a un zumo o a una Coca-Cola (esto gracias a @Sherpa41. Se acabó tomar azucarillos). Con eso aguantaré sin comer 2 horas más si voy a estar quietecita (por ejemplo, trabajando con el ordenador).
Está claro que hay una diferencia tremenda en los picos a la hora de haber empezado a comer, pero si lo que cuenta es la glucemia dos horas después de haber empezado a comer, acabar con 140 o 110 no me parece tan diferente.
Ya os imaginaréis que he hecho todo tipo de pruebas: mismas horas, misma comida, mismo tipo de HC subiendo y bajando dos-tres raciones, todo pesado y calculado, misma glucemia o aproximada en el momento de empezar la ingesta, mismo tiempo para ponerme la insulina, etc.
Cuando me administro la dosis «real» que necesitaría, si es más de 6, acabo con hipo (60 y bajando), si es menos de 6 acabo con hiper (170 y subiendo).
Así que últimamente en mi día a día ya ni peso la comida ni cuento raciones ni nada de nada. Sé que son 6 unidades de rápida en la comida y 6 en la cena. Las sorpresas me las dan el desayuno y la merienda que tienen vida propia y FSI muy suyos.
Solo me administro una dosis superior a 6 unidades cuando como fuera y no me privo de nada: rebozados, salsas, pan, pasta, cerveza, vino, postre, etc. Y tengo que hacerlo en dos o tres veces. Como me ponga más de 6 unidades de golpe porque todo lo que coma equivalga a 10 o 12 unidades, incluso estando la comida ya en la mesa, sin esperas entre platos, ya la he liado. Hipo asegurada de esas que bajan a toda pastilla a la hora y preciosa hiper a las dos horas.
Añado también que he ido bajando las unidades de Toujeo. Ahora me pongo 15 unidades por la mañana. Me levanto pelín alta (unos 140-150 mg/dL), pero me compensa dormir todo seguido, sin hipos nocturnas. Mi hemoglobina de hace una semana sigue en 5,9 %.
¿Qué se me está escapando?
Gracias anticipadas.
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Este post se basa en el tema «¿Se acostumbra el cuerpo a una dosis fija de insulina rápida en las comidas?« publicado en Diabetes Foro.
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