Hola, ¿qué tal?
Me parece estar en una situación similar a la de un usuario anterior. Llevo el tratamiento de Lantus (20 unidades en la noche) y Novorapid (variable pero con base de 7).
Hace unos días sufrí de una amigdalitis. La situación se empezó a complicar porque, a pesar de que comía saludablemente y menos de lo normal, y me inyectaba la cantidad correcta de insulina, mis niveles de glucosa fluctuaban entre 250 y 350 después de comer.
Pensé que era por los anticuerpos y hormonas, además de los medicamentos y antibióticos, pero ya dejé de tomarlos hace días y prácticamente ya estoy curado de la amigdalitis.
Sin embargo, el problema con la glucosa y las comidas persiste, así que opté por aumentar la dosis de insulina.
Experimenté hasta dar con valores normales de glucosa, inyectándome HASTA 21 UNIDADES de Novorapid antes de cada comida.
Aunque parezca demasiado, gracias a esto he podido mantener mis valores entre 80 y 120, pero al momento de ir a dormir, aunque tenga en ese rato 90 de glucosa, amanezco con 200.
¿Cuál es la razón de esto?
¿Por qué, aunque ya esté casi curado, sigue pasando esto?
¿Cuánto tiempo más durará?
¿Debería cambiar de insulina por una lenta y rápida u otra de acción más prolongada mientras se resuelve esto?
¿Qué relación existe entre las enfermedades respiratorias y las subidas de glucosa?
Muchísimas gracias, espero que me ayuden.
Saludos.
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Este post se basa en el tema «Las dosis normales ya no son suficientes« publicado en Diabetes Foro.
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